Un equipo de investigadores de la empresa Colossal Biosciences logró el primer avance significativo en la desextinción al crear cachorros de lobo gris portadores de genes del extinto lobo gigante, especie que desapareció hace aproximadamente 13,000 años.
Este resultado es considerado un hito en los esfuerzos científicos por revivir especies desaparecidas. Beth Shapiro, directora científica de Colossal, describió a las crías como “el primer caso de éxito de desextinción”.
“Estamos creando copias funcionales de algo que solía estar vivo”, afirmó en una entrevista para The New York Times.
La empresa, fundada en 2021 y valorada en 10,000 millones de dólares en enero, inició este proyecto modificando el ADN de lobos grises. Para ello, los científicos editaron 20 genes utilizando material genético recuperado de fósiles antiguos. Posteriormente, crearon embriones a partir de las células editadas y los implantaron en madres sustitutas caninas.
El resultado fue el nacimiento de tres lobos: dos machos de seis meses, nombrados Rómulo y Remo, y una hembra de dos meses, Khaleesi. Estos animales presentan características propias de los lobos gigantes, como un tamaño considerablemente mayor al de los lobos grises actuales y un pelaje denso y pálido.
Los ejemplares se mantienen en una instalación privada de más de 800 hectáreas en una ubicación no revelada en el norte de Estados Unidos. Shapiro, quien se unió a Colossal en 2024, formó parte del equipo que en 2021 recuperó por primera vez ADN de lobo gigante a partir de fósiles.
En la nueva etapa del proyecto, ella y sus colegas utilizaron técnicas avanzadas para aislar más material genético, logrando extraer ADN abundante de un diente de 13,000 años encontrado en Ohio y de un cráneo de 72,000 años hallado en Idaho.
Con estos genomas, los científicos pudieron reconstruir con mayor detalle la historia evolutiva del lobo gigante, que pertenecía al mismo linaje que dio origen a lobos, chacales y perros salvajes africanos actuales.
Según Julie Meachen, paleontóloga de la Universidad de Des Moines y participante en el proyecto, los lobos gigantes se separaron de la rama principal hace unos 4.5 millones de años. Hace aproximadamente 2.6 millones de años, se cruzaron con otras especies, incluidos los antepasados de los lobos grises y coyotes.
Los estudios revelaron que los lobos gigantes superaban en tamaño a los lobos grises en aproximadamente un 25 por ciento, poseían enormes dientes y mandíbulas, y cazaban presas como caballos, bisontes e incluso mamuts.
Meachen indicó que, tras la extinción de muchas de sus presas, posiblemente influida por la actividad humana, el lobo gigante desapareció, permitiendo al lobo gris expandirse por Norteamérica. El análisis genético también mostró que los lobos gigantes y grises son genéticamente idénticos en más de un 99 por ciento, aunque 80 genes presentan diferencias significativas.
Algunos de estos genes influyen en el tamaño y características del pelaje. Shapiro y sus colegas descubrieron que los lobos gigantes portaban genes asociados con un pelaje claro y denso, adaptado a climas fríos, hallazgos que serán detallados en un próximo artículo científico.
Para llevar a cabo la desextinción, los científicos aislaron células de sangre de lobos grises y las cultivaron en laboratorio. Ahí, introdujeron mutaciones específicas en 15 de los 20 genes identificados, evitando cinco mutaciones que, según estudios anteriores, podrían provocar sordera y ceguera.
La empresa también inició experimentos de clonación de otras especies. En paralelo al proyecto de lobos gigantes, Colossal anunció la creación de cuatro clones híbridos de lobo rojo y coyote. Estos ejemplares podrían reforzar la diversidad genética del lobo rojo, especie en peligro crítico de extinción, limitada principalmente a Carolina del Norte.
SOUND ON. You’re hearing the first howl of a dire wolf in over 10,000 years. Meet Romulus and Remus—the world’s first de-extinct animals, born on October 1, 2024.
— Colossal Biosciences® (@colossal) April 7, 2025
The dire wolf has been extinct for over 10,000 years. These two wolves were brought back from extinction using… pic.twitter.com/wY4rdOVFRH
A largo plazo, la tecnología desarrollada por Colossal podría ser utilizada para conservar especies vivas y revivir otras extintas, como el mamut lanudo o el dodo, aunque esos proyectos enfrentan retos técnicos adicionales.
“Era el camino más sencillo para obtener un resultado predecible”, subrayó Shapiro, en referencia a la elección del lobo gigante como objetivo inicial.