Pese al riesgo internacional que representa el posible cierre del estrecho de Ormuz, la administración federal aseguró que no se anticipan impactos inmediatos en el abasto ni en el precio de las gasolinas en territorio nacional.
La presidente de la República, Claudia Sheinbaum Pardo, confirmó que el país se encuentra en una posición más sólida frente a las fluctuaciones del mercado petrolero global, derivadas del conflicto entre Irán e Israel.
“Si subiera mucho el precio de las gasolinas, el IEPS permitiría mantener los precios estables en México”, declaró la mandataria, aludiendo al mecanismo fiscal vigente que regula el impacto al consumidor en caso de incrementos abruptos en los precios internacionales.
El estrecho de Ormuz, corredor marítimo de poco más de 30 kilómetros que conecta al Golfo Pérsico con mercados estratégicos, representa una de las rutas petroleras más transitadas del planeta. Su cierre por razones bélicas elevaría los costos globales del crudo; sin embargo, hasta ahora los movimientos en el precio han sido mínimos, puntualizó Sheinbaum.
“Hasta ahora, en términos del precio del petróleo, el incremento es realmente muy poco en los últimos días”, añadió al respecto.
La titular del Ejecutivo explicó que, a diferencia de ciclos anteriores, México ha disminuido considerablemente su dependencia de la importación de combustibles, gracias a proyectos recientes en infraestructura de refinación, como la compra de Deer Park en Estados Unidos y la operación de la planta en Dos Bocas, Tabasco.
Según explicó, el petróleo producido en el país se refina en su mayoría en instalaciones nacionales, lo que otorga un margen de maniobra más amplio frente a crisis externas.
Política exterior: principio constitucional como guía
En otro tema, la presidente fue cuestionada sobre la postura del gobierno mexicano respecto al conflicto armado en Medio Oriente y las recientes declaraciones del expresidente estadounidense Donald Trump en torno a un eventual cambio de régimen en Irán. En respuesta, reafirmó que la política exterior mexicana permanece anclada a sus lineamientos constitucionales.
“La soberanía de los pueblos es siempre nuestra postura. Cada pueblo tiene derecho a decidir su forma de gobierno”, dijo al recordar el marco establecido por el artículo 89, fracción décima, de la Carta Magna.
Sin emitir juicios sobre la naturaleza de las acciones militares en Palestina, Sheinbaum subrayó que México sostiene una posición equilibrada basada en el reconocimiento de ambas entidades en conflicto.
“México reconoce a los dos Estados, el palestino y el israelí, y ha condenado las agresiones a la población civil. Pero siempre nos conducimos en el marco de la Constitución y la búsqueda de la paz”, expresó.
La mandataria recordó que el país ha mantenido históricamente una política de neutralidad activa, promoviendo la resolución pacífica de controversias y el respeto a los derechos humanos, más allá de alineamientos geopolíticos o presiones internacionales.