Con la proyección de documentales, un conversatorio y un homenaje a uno de sus principales impulsores, la Secretaría de Cultura de Michoacán (Secum) conmemoró el 45 aniversario del Cineclub del Museo Casa Natal de Morelos, un espacio emblemático para la promoción del cine independiente y el fortalecimiento de la comunidad cinéfila en el estado.
Desde su fundación en 1980, este cineclub se ha mantenido como un punto de encuentro para los amantes del séptimo arte, ofreciendo funciones semanales que, durante décadas, han nutrido la vida cultural de Morelia y otras regiones del estado. Actualmente, continúa su labor bajo la gestión de la Secum.
La titular de la dependencia, Tamara Sosa Alanís, destacó la importancia del recinto como generador de comunidad y plataforma de expresión cinematográfica.
“Necesitamos más espacios así, en donde se fortalezcan las comunidades y, en este caso, aquí hay una muy rica que le encanta el cine y que han hecho de este espacio un lugar muy vivo”, expresó durante la ceremonia conmemorativa.
Uno de los momentos más emotivos de la jornada fue el reconocimiento a José Benjamín Díaz, quien durante 33 años, de 1986 a 2019, fue el encargado de programar las funciones del Cineclub. Su dedicación fue celebrada con la entrega de una moneda conmemorativa de los 200 Años de Michoacán.
La jefa del Departamento de Cine de la Secum, Jennifer Córdova Solís, subrayó el papel fundamental de quienes han sostenido este proyecto a lo largo de los años.
“Este espacio se mantiene gracias a ustedes”, señaló, en alusión a los promotores y asistentes que han dado vida al recinto desde hace más de cuatro décadas.
Como parte de las actividades del aniversario, se proyectaron los documentales Lo que nos queda y Cámara oscura, obras del cineasta michoacano Yudiel Landa. En ellas, el autor explora temas como la memoria, la violencia y el cine como lenguaje emocional. Lo que nos queda retrata la historia de Nueva Italia, municipio de Múgica, donde el cierre del último cine marcó el inicio de un periodo de incertidumbre frente a la violencia generada por el crimen organizado.
“Uno va al cine a vivir historias, pero también a construir memoria. Las películas nos permiten volver a mirar lo que fuimos y lo que somos”, reflexionó Landa tras la proyección.
Posteriormente, se llevó a cabo el conversatorio Una sala, mil miradas, coordinado por el colectivo Ojo Libre, con la participación de la creadora visual Cristina Bustamante, la directora Virginia Rico Meneses y el propio Benjamín Díaz. El diálogo giró en torno al cine como archivo colectivo y como herramienta para compartir emociones, resistencias y experiencias comunitarias.
El Auditorio del Museo Casa Natal de Morelos, sede del Cineclub, ha sido un espacio recurrente para festivales como el Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM), el ANIMAL Film Fest y el Festival Cuórum. También alberga actualmente el ciclo Cinema Michoacán, que busca visibilizar el trabajo de cineastas locales a través de proyecciones y diálogos con el público.
